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Track List
01) Harbinger
02) Animus
03) Silhouette
04) Shabda
05) The Tempest
06) Harbinger (reprise)
07) On My Heart
08) Aurora
09) Prophecy
10) On My Heart (reprise)
11) Harmonia Mundi
12) The Other Side
13) Empyrean
14) Musica Universalis
01) Harbinger
02) Animus
03) Silhouette
04) Shabda
05) The Tempest
06) Harbinger (reprise)
07) On My Heart
08) Aurora
09) Prophecy
10) On My Heart (reprise)
11) Harmonia Mundi
12) The Other Side
13) Empyrean
14) Musica Universalis
4:08
3:09
3:19
3:56
5:48
1:30
2:26
3:42
2:54
1:16
3:46
1:28
1:37
6:24
Data Complete
90%
Total Rating
90%Total Rating
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Back Cover
CD Art
3D Case
3D Thumb
3D Flat
3D Face
3D Spine
First Released
2008
Progressive Rock
Reflective
Rock/Pop
---
Medium
Album
0 copies
Album Description
Available in:
"Music of the Spheres" es un álbum del músico inglés Mike Oldfield lanzado en el Reino Unido el 17 de marzo de 2008. Cuenta con las colaboraciones de la soprano neozelandesa Hayley Westenra en el tema "On My Heart" y del pianista chino Lang Lang en seis de sus pistas.
El álbum, el segundo con Mercury Records y su primer trabajo clásico, se basa en el concepto de la "musica universalis" o armonía de las esferas. Una edición limitada con dos CD se lanzó el 24 de noviembre de 2008 e incluía tanto la versión de estudio como grabaciones en directo. Estuvo nominado a los "Classical BRIT Awards" en 2009.
En una entrevista en la BBC Radio 2, Oldfield desveló que estaba trabajando en un nuevo proyecto instrumental y sin baterías así como la posibilidad de una gira. Y en otra entrevista dijo que el álbum se iba a basar en la festividad de Halloween en lugar de la película del mismo nombre, en la que solo introdujo una guitarra clásica y un piano.
En un principio el álbum estaba escrito con elementos electrónicos, como Light + Shade, pero tan pronto como el álbum vio la luz, se convirtió en un álbum orquestal. El single "Spheres" es uno de los primeros que dio el álbum. Oldfield escribió la mayoría de los temas en el Sibelius en Macintosh. Una cosa que sí que noto Oldfield al grabar fue que crear la orquestación llevaba mucho tiempo y que la velocidad variaba demasiado.
En un programa de televisión, mientras promocionaba su autobiografía, Oldfield dijo que iba a grabar el disco con Karl Jenkins y una orquesta al completo en los estudios Abbey Road a principios de junio de 2007, nueve meses antes de la fecha de lanzamiento. Y en otro programa de radio desveló que Lang Lang había grabado los temas donde colaboraba desde los estudios Legacy Recording en Nueva York, usando iChat y un piano Steinway.
El lanzamiento del álbum se retrasó varias veces por distintos motivos. La fecha para la que estaba programada era la de Halloween, pero al final se retrasó hasta noviembre de 2007. En septiembre de ese año, Oldfied y Universal Records decidieron retrasarlo hasta enero alegando razones personales. Sin embargo, en noviembre el lanzamiento se pospuso hasta marzo de 2008, ya que por entonces Oldfield visitaba con frecuencia España. También iba a ser el primer álbum clásico en ser publicado en una memoria USB, pero al final solo se publicó en CD y en Internet. En iTunes el álbum está disponible con material adicional. Y en 24 de noviembre de 2008 se lanzó una versión limitada que incluía tanto la versión de estudio como la versión en directo.
El álbum fue el número uno de la lista de clásicos del Reino Unido, según la revista "Music Week". También fue el número nueve en la lista de álbumes del Reino Unido, haciendo del álbum el más exitoso de los años 2000. Otro logro que consiguió fue el de ser el segundo álbum de clásicos mejor vendido del 2008.
User Album Review
If you're going to prove your detractors wrong better to do it in grand style. In his autobiography (Changeling 2007) Mike Oldfield describes how, after being the butt of patronising attitudes whilst a member of Kevin Ayers' band, he wanted to come up with something that would make everyone sit up and take him seriously. Well, it doesn't get much grander than Tubular Bells, and more or less the whole wide world (give or take a few million sales here and there) sat up and took notice.
The phenomenal success didn't necessarily make him happy. Several times in his book he talks of being grateful for the abiding interest in Bells whilst simultaneously resentful about having everything he does compared to that first record. Despite such stylistically diverse pieces such Ommadawn, the catchy pop and rock of Moonlight Shadow or Family Man, or even the techno-tinged moods of 2005's Light And Shade, he's never quite escaped the gilded cage which his debut album has constructed around him.
It's no great surprise, therefore, that the dancing string motif of the opening track Harbinger is clearly drawn from the same gene pool as the first fruit of his loins. Similarly the stirring bass figures which stoke the engines of Musica Universalis bear a striking resemblance to those underpinning the Viv Stanshall-narrated coda of Tubular Bells.
Back then the guitar was pretty much the star. Here Oldfield's tunes have been threaded into Karl Jenkins' opulent orchestral embroidery. Not surprisingly Music Of The Spheres does sound an awful lot like an Adiemus album at times. Shabda in particular has those choral voices that Jenkins pushed to the fore though mercifully aren’t lumbered with that ridiculous invented 'ethnic' language which Jenkins devised.
Perhaps because Oldfield's presence is limited to a few cameo appearances the album lacks the personality and tension which he achieved with side one of Tubular Bells. And if that seems unfair then it's because so much of Music Of The Spheres sounds like an old arrival rather than a new departure.
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"Music of the Spheres" es un álbum del músico inglés Mike Oldfield lanzado en el Reino Unido el 17 de marzo de 2008. Cuenta con las colaboraciones de la soprano neozelandesa Hayley Westenra en el tema "On My Heart" y del pianista chino Lang Lang en seis de sus pistas.
El álbum, el segundo con Mercury Records y su primer trabajo clásico, se basa en el concepto de la "musica universalis" o armonía de las esferas. Una edición limitada con dos CD se lanzó el 24 de noviembre de 2008 e incluía tanto la versión de estudio como grabaciones en directo. Estuvo nominado a los "Classical BRIT Awards" en 2009.
En una entrevista en la BBC Radio 2, Oldfield desveló que estaba trabajando en un nuevo proyecto instrumental y sin baterías así como la posibilidad de una gira. Y en otra entrevista dijo que el álbum se iba a basar en la festividad de Halloween en lugar de la película del mismo nombre, en la que solo introdujo una guitarra clásica y un piano.
En un principio el álbum estaba escrito con elementos electrónicos, como Light + Shade, pero tan pronto como el álbum vio la luz, se convirtió en un álbum orquestal. El single "Spheres" es uno de los primeros que dio el álbum. Oldfield escribió la mayoría de los temas en el Sibelius en Macintosh. Una cosa que sí que noto Oldfield al grabar fue que crear la orquestación llevaba mucho tiempo y que la velocidad variaba demasiado.
En un programa de televisión, mientras promocionaba su autobiografía, Oldfield dijo que iba a grabar el disco con Karl Jenkins y una orquesta al completo en los estudios Abbey Road a principios de junio de 2007, nueve meses antes de la fecha de lanzamiento. Y en otro programa de radio desveló que Lang Lang había grabado los temas donde colaboraba desde los estudios Legacy Recording en Nueva York, usando iChat y un piano Steinway.
El lanzamiento del álbum se retrasó varias veces por distintos motivos. La fecha para la que estaba programada era la de Halloween, pero al final se retrasó hasta noviembre de 2007. En septiembre de ese año, Oldfied y Universal Records decidieron retrasarlo hasta enero alegando razones personales. Sin embargo, en noviembre el lanzamiento se pospuso hasta marzo de 2008, ya que por entonces Oldfield visitaba con frecuencia España. También iba a ser el primer álbum clásico en ser publicado en una memoria USB, pero al final solo se publicó en CD y en Internet. En iTunes el álbum está disponible con material adicional. Y en 24 de noviembre de 2008 se lanzó una versión limitada que incluía tanto la versión de estudio como la versión en directo.
El álbum fue el número uno de la lista de clásicos del Reino Unido, según la revista "Music Week". También fue el número nueve en la lista de álbumes del Reino Unido, haciendo del álbum el más exitoso de los años 2000. Otro logro que consiguió fue el de ser el segundo álbum de clásicos mejor vendido del 2008.
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If you're going to prove your detractors wrong better to do it in grand style. In his autobiography (Changeling 2007) Mike Oldfield describes how, after being the butt of patronising attitudes whilst a member of Kevin Ayers' band, he wanted to come up with something that would make everyone sit up and take him seriously. Well, it doesn't get much grander than Tubular Bells, and more or less the whole wide world (give or take a few million sales here and there) sat up and took notice.
The phenomenal success didn't necessarily make him happy. Several times in his book he talks of being grateful for the abiding interest in Bells whilst simultaneously resentful about having everything he does compared to that first record. Despite such stylistically diverse pieces such Ommadawn, the catchy pop and rock of Moonlight Shadow or Family Man, or even the techno-tinged moods of 2005's Light And Shade, he's never quite escaped the gilded cage which his debut album has constructed around him.
It's no great surprise, therefore, that the dancing string motif of the opening track Harbinger is clearly drawn from the same gene pool as the first fruit of his loins. Similarly the stirring bass figures which stoke the engines of Musica Universalis bear a striking resemblance to those underpinning the Viv Stanshall-narrated coda of Tubular Bells.
Back then the guitar was pretty much the star. Here Oldfield's tunes have been threaded into Karl Jenkins' opulent orchestral embroidery. Not surprisingly Music Of The Spheres does sound an awful lot like an Adiemus album at times. Shabda in particular has those choral voices that Jenkins pushed to the fore though mercifully aren’t lumbered with that ridiculous invented 'ethnic' language which Jenkins devised.
Perhaps because Oldfield's presence is limited to a few cameo appearances the album lacks the personality and tension which he achieved with side one of Tubular Bells. And if that seems unfair then it's because so much of Music Of The Spheres sounds like an old arrival rather than a new departure.
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